Los esperamos y no dejen de llevar a sus hijos, no les nieguen la oportunidad de conocer la verdadera historia contemporánea de la causa justa de Malvinas.
miércoles, 11 de abril de 2018
Charlas Especializadas y Eventos :Malvinas desde el Aire 2018
Los esperamos y no dejen de llevar a sus hijos, no les nieguen la oportunidad de conocer la verdadera historia contemporánea de la causa justa de Malvinas.
domingo, 24 de abril de 2016
Charlas Especializadas y Eventos :Malvinas desde el Aire
sábado, 13 de diciembre de 2014
Aviones Olvidados: VOUGHT F7U CUTLASS
Fue el primer caza con alas en flecha
de la US Navy y el primero sin planos convencionales de cola construído en los
Estados Unidos para empleo militar, siendo además el primer caza norteamericano
proyectado desde su nacimiento para la instalación de un posquemador. Solo
se terminaron 307 unidades de este aparato de transición.
Su desarrollo comenzó poco después de
terminada la WWII y se basó en estudios realizados por Alemania durante el
conflicto, en especial los hechos por la Arado
Flugzeugwerke GmbH referentes a los aparatos de combate sin cola
convencional.
El proyecto avanzó muy rápidamente
dando vida a un aparato completamente anticonvencional: el ala tenía una flecha
positiva de 38º y escaso alargamiento, llevando en su borde de salida
superficies de control especiales (elevones) con funciones simultáneas de
equilibrador y de alerones. Finalmente, llevaba en sus alas derivas y timones
dobles a la altura de la sección central alar.
Sus plantas motoras serían dos
turborreactores Westinghouse J34-WE-32 con posquemador. La
Armada de los USA se mostró muy interesada para la utilización del aparato como
interceptor embarcado y también en otras múltiples funciones para las que
parecía ser apto.
El primer vuelo recién se efectuó dos
años más tarde, en setiembre de 1948, cuando la Chance Vought ya tenía en
construcción 14 unidades de serie y estaba desarrollando dos versiones más
(F7U-2 y F7U-3) con distintos motores, para las que estaba prevista una serie
total de 90 aparatos. Por dificultades en la puesta a punto de los motores de
estas dos versiones, la variante se canceló. No obstante, se decidió modificar
estructuralmente la F7U-3 después de comprobar problemas con los 14 F7U-1
profundamente evaluados durante largo tiempo.
El nuevo F7U-3,
modificado profundamente en la forma del fuselaje y en la estructura de las
derivas, voló finalmente en diciembre de 1951, centrándose la producción en este
modelo, del que se completaron 180 aparatos.
ESPECIFICACIONES TÉCNICAS
DEL VOUGHT F7U-3M CUTLASS
Tipo: caza
Año: 1951
Motor: 2 turborreactores
Westinghouse J46-WE-8A, de 2086 kg de empuje cada uno.
Envergadura: 11,78
m
Longitud: 13,48 m
Altura: 4,45 m
Peso al despegar: 14.353
kg
Velocidad máxima: 1094 km/h a
3050 m de altitud
Techo operativo: 12.190
m
Autonomía: 1060 km
Armamento: 4 cañones de 20 mm y
4 misiles aire-aire
Tripulación: un
hombre
A las anteriores unidades
construídas, deben añadirse 12 F7U3P de reconocimiento
fotográfico y 98 F7U-3M dotados de misiles Sperry Saparrow
I.
Las líneas de montaje se cerraron
definitivamente en diciembre de 1955, no durando la vida operativa de los
Cutlass mucho más tiempo, ya que fueron retirados paulatinamente a partir de
comienzos de 1957 de la primera línea cuando comenzaron a llegar las primeras
unidades de producción del supersónico F8U
Crusader.
CUTLASS DECOLANDO DE UN
PORTAAVIONES
PAR DE F7U-3 EN LA CUBIERTA DE
VUELO
F8 CRUSADER VOLANDO EN
FORMACIÓN
Historia de Pilotos , Ha fallecido a los 99 años la piloto femenina británica más destacada en la IIda Guerra Mundial, Lettice Curtis
Aprendió a volar en 1937 en el Yapton
Flying Club cerca de Chichester. Al cabo de su adiestramiento inicial voló 100
horas en solitario con el fin de obtener la licencia comercial B. En mayo de
1938 pasó a desempeñarse en CL Aerial Survey; Volando un Puss Moth, dotado con
una cámara, fotografió distintas áreas de Inglaterra para el Ordnance Survey,
presumo un organismo como el que alguna vez fue nuestro Instituto
Geográfico Militar. Al declararse la guerra fue
transferida al departamento de investigación del citado organismo
Fue convocada en 1940, cuando el Reino Unido, al
cabo de la ignominiosa derrota de Francia, debió apellar a todos sus recursos
humanos para enfrentar, junto con sus dominios, al mejor Ejercito y mejor Fuerza
Aérea de entonces y si la Kriegsmarine no lo era fue porque el almirante
Raeder vio frustrados sus planes de expansión, que hubieran fructificado en
1944, como consecuencia de una errónea apreciación de Hitler al presumir que ni
Francia ni Gran Bretaña reaccionarían ante la invasión de Polonia,
facilitada esta por un sorpresivo Pacto de No Agresión con la Unión Soviética
que, además, se convirtió en suministrador de distintas materias primas,
atenuando de esa manera el bloqueo de su tráfico comercial. Italia, que en
la Gran Guerra fue un aliado, en el año mencionado devino en
un especulativo enemigo que pasó a constituir una potencial amenaza en el
Mediterráneo, situación agravada por la desaparición de las naves francesas de
ese teatro.
La convocatoria a Curtis provenía del
Air Transport Auxiliary (ATA), donde se había decidido acudir a personal
femenino para llevar a cabo esas tareas auxiliares que, en particular,
significaban el traslado de aviones desde las fábricas a los aeródromos
operativos mientras que los hombres pasaban a satisfacer los requerimientos de
la Real Fuerza Aérea (RAF)
En un pequeño grupo inicial de jóvenes mujeres, Lettice Curtis comenzó, en
Hatfield, su adiestramiento en aviones livianos de entrenamiento y transporte.
Rápidamente calificó para volar máquinas más avanzadas tal como el bimotor
Oxford.
Las pilotos del ATA frecuentemente volaban solas
y sin ayuda alguna en cuanto a navegación; dependiendo casi exclusivamente en la
lectura de un mapa en sus misiones.
Hasta la primavera boreal de 1941, una
disposición gubernamental impedía a las mujeres pilotear aviones de combate,
pero en ese verano pasaron a trasladarlos.
Sin otra ayuda adicional que una planilla de
verificación (Checking List) Lettice Curtis trasladó su primer Hurricane
ese verano al que siguieron otros y los más famosos Spitfires.
En septiembre de 1941 los vuelos se extendieron
a aviones más avanzados y Lettice Curtis pronto se graduó en pilotear
bombarderos Blenheim, Hampden y Wellington. En el otoño boreal de 1942 fue
asignada a una base de bombarderos cuatrimotores donde se calificó para volar
los Halifax. El año siguiente estaba calificada para pilotear otros
cuatrimotores incluidas las denominadas fortalezas volantes estadounidenses
B-17. En 1944 fue la primer mujer en entregar un Lancaster.
Cuando, al finalizar la Guerra,,cesó la
actividad de ATA, fue considerada la organización femenina más
experimentada en el traslado de aviones al haberlo hecho con más de 400
bombarderos pesados, 150 De Havilland Mosquitos y cientos de Hurricanes y
Spitfires.
Finalizado el conflicto pasó a desempeñarse en
el Armament Experimental Establishment para luego pasar a ocupar el
cargo de ingeniera senior de desarrollo en Fairey Aviation en 1953 donde
participó en vuelos de prueba de distintos aviones, entre ellos el piquete
radar (Air Early Early Warning) Gannet destinado a la Armada
Real
.
Participó en carreras organizadas por el Royal Aero Club. A
comienzos de los sesenta dejó Fairey para pasar al Ministerio de Aviación
y trabajar en planes concernientes a material civil y militar y un
Centro de control civil de tráfico aéreo. Después de un breve paso por la
Inspección de Operaciones de Vuelo de la Autoridad de la Aviación Civil
pasó a desempeñarse en Sperry Aviation.
Mostró un firme apoyo al proyecto que dio
lugar al supersónico Concorde. En 1992 calificó como piloto de helicóptero, pero
tres años más tarde, al cumplir 80, años decidió que sus tiempos de
volar habían terminado.
En lo que se refiere a sus actividades en el ATA consideró que ese
servicio no fue suficientemente reconocido, por lo que en 1971 publicó el libro
The forgotten pilots. Su autobiografía como Lettice Curtis
apareció en 2004. .
Obituario
aparecido en el Daily Telegraph
Historias de Vuelo, El ministro que se cayó del avión
Un pozo de aire hizo descender la aeronave en que viajaba y lanzó al vacío, en 1927, al ministro de Guerra, general Agustín P. Justo, luego presidente de la Nación. Sobrevivió gracias al paracaídas y fue rescatado varias horas después.
A tantos años de distancia, es difícil representarse lo que significó el general Agustín P. Justo en la política argentina. Manejó con inigualada destreza sus hilos durante más de una década y mantuvo a raya a las Fuerzas Armadas. Egresado del Colegio Militar, graduado de ingeniero en la Universidad de Buenos Aires, fue ministro de Guerra del presidente Marcelo T. de Alvear, revolucionario de 1930, comandante en jefe del Ejército y presidente de la República de 1932 a 1938. Dado su prestigio en el Ejército y en la política, muchos suponen que, si no hubiera muerto repentinamente en 1943, a los 67 años -cuando se preparaba a pujar por otra presidencia- no hubiera habido revolución del 4 de junio, ni 17 de octubre de 1945, ni Juan Domingo Perón.
La vida de Justo contiene un episodio dramático con final feliz. Ocurrió en 1927, en sus tiempos de ministro de Guerra. Tenía por costumbre realizar giras aéreas, en los precarios aparatos de entonces, por las unidades militares de todo el país.
En el vacío
Durante una de esas misiones, subió al avión en Córdoba y, si bien cargó a la espalda la mochila con el paracaídas, no se ató el correaje que lo aseguraba al asiento. En un momento dado, cuando volaban a más de 1.000 metros de altura sobre los llanos de La Rioja, un pozo de aire hizo descender bruscamente el aparato. El movimiento sacó a Justo de su sitio y lo lanzó al vacío.
Con gran presencia de ánimo, el corpulento ministro logró activar el paracaídas, que se abrió con un cimbronazo. "En el aire, comenzó a girar rápidamente sobre el eje que forman las cuerdas de sostén, primero en un sentido, luego en otro", narra Adolfo Lanús. "Enseguida el general se recobró: miró el reloj pulsera, miró la vía férrea y tomándose de las cuerdas de que pendía y haciendo flexión con los brazos contuvo el movimiento giratorio". Al divisar los rieles, se ubicó en los puntos cardinales. En siete minutos cayó a tierra ileso, sobre uno de los garabatos espinosos que abundan en el áspero paisaje llanista. Entretanto, el aterrorizado piloto había dado aviso de haber perdido a su pasajero, y empezó una empeñosa búsqueda por aire y por tierra.
De pie y con ademanes
Que estaba vivo lo supieron pronto. Los primeros pilotos rescatistas lo divisaron de pie, ocupado en extender el paracaídas para que sirviera de punto de referencia. Al mismo tiempo, les indicaba, "con ademanes de mando que siguieran viaje a La Rioja, pues intentar un descenso sobre aquellos campos quebrados y hoscos hubiera resultado francamente suicida", cuenta Lanús.
Cuando terminó de estirar el paracaídas, eran las once de la mañana y hacía mucho calor. Se acostó a la sombra de un algarrobo. Quería evitar el sol de la siesta y descansar: calculaba que una caminata a esa hora acentuaría la sed que ya venía experimentando. No tenía un revólver y tampoco fósforos, porque no fumaba, de modo que no podía hacer tiros ni encender fuego. La única forma de alertar sobre su presencia sería gritar.
El tren de rescate
Al caer la tarde empezó a marchar rumbo a las vías del tren. Los rastreadores encontraron el paracaídas, el traje de aviador y hasta un guante que fue dejando en el camino.
Varias comisiones de búsqueda partieron de La Rioja. La más numerosa iba en tren, con médicos y conocedores de la zona. Cuando entraron en el sector de la caída, el tren marchaba lentamente y se detenía cada media legua, para que un grupo explorador bajase y se internase en el campo. Se decidió que a la búsqueda había que hacerla entre las estaciones de Patagonia y Punta de los Llanos, de modo que el convoy iba y volvía, a paso de hombre, entre ellas. Y el jefe de Policía de La Rioja, Jesús Salas, se ufanaba de llevar a su lado al mejor "gritón" de los llanos, a fin de que su voz pudiera ser oída por Justo desde lejos.
Imprevista aparición
A todo esto, hacia las diez de la noche, Justo había avistado el tren explorador a una cuadra de distancia. Gritó, pero los alaridos del riojano que lo llamaba taparon completamente su voz. Entonces, el general llegó hasta las vías y decidió acostarse junto a ellas, para esperar. Con la noche, había empezado a morderlo el frío.
La locomotora hacía sonar el silbato y a lo largo de la vía se había instalado vivaques con fogatas. El tren seguía yendo y viniendo, y se detenía en los vivaques para pedir noticias. Dentro de los vagones, un grupo de exploradores aburridos, jugaba al "siete y medio". De pronto, estupefactos, en una de las detenciones del tren vieron entrar al general Justo al vagón. Minutos después, el ministro procedía a narrar su odisea por primera vez a los jugadores y a todos los que se les iban uniendo.
Encima, un temblor
El tren lo llevó a La Rioja, donde fue recibido con gran entusiasmo a pesar de lo avanzado de la hora. Se retiró a descansar, pero no habían concluido las zozobras: a medianoche lo despertó un fuerte temblor. Al día siguiente, subió a un avión militar que lo condujo a Buenos Aires. Cuando aterrizaron, lo esperaba el presidente Marcelo T. de Alvear con sus ministros y gran cantidad de oficiales, funcionarios y público. Ni bien pisó tierra, se confundió en un abrazo con su esposa, Ana Bernal.
Restó importancia al episodio. Alguna vez explicó que no había abrochado el cinturón de seguridad, porque sus hebillas eran muy parecidas a las del paracaídas. Y, en cualquier emergencia, un error al manipularlas podía hacer que no se soltase el cinto sino el paracaídas.
Fuente. La Gaceta de Tucumán
Aeroclub Saladillo Despedida de Fin de Año
Estimados Amigos, los invitamos a
despedir el 2014 el próximo fin de semana (13 y 14) en el Aeroclub de
Saladillo haciendo lo que más nos gusta, volar.
Aquellos que quieran coordinar alojamiento y hangaraje pueden llamarnos al 02344 454548 de 8 a 17 Hrs.
Saludos.
Fernando Cicare
CEO
CICARE S.A.
+54 2344 454548
www.cicare.com.ar
viernes, 14 de marzo de 2014
Réplica Deperdussin SIlvio Pettirossi Yvytu Paraguay 2014 1er Vuelo
El 22-02-2014 voló la replica del Deperdussin de
Silvio Pettirossi
Relaizó un vuelo de 100 metros a una altura de aprox. 1 metro,
El proyecto llevó 7 años de Consturccion y diseño.
El Piloto Beto Viera Verci reportó buen funcionamiento de frenos y un vuelo equilibrado y sin tendencias con
buena respuesta de la torsión de alas. Además añadió que no fue necesaria usar
toda la potencia del A40.
Un abrazo a todos en este día que recordaremos por siempre.
Texto: Juan C. Parini
Fotos y Video : E.Isfran JC Parini
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